¿Qué son los aceites esenciales?
Los aceites esenciales son sustancias aromáticas que fabrican algunas plantas y árboles. Son volátiles, es decir, se evaporan en el aire. Por este motivo podemos sentir sus aromas.
¿Por qué las plantas fabrican aceites esenciales?
Solamente un 10% de las plantas fabrican aceites esenciales.
¿Para qué una planta fabrica una sustancia que se evapora y «se pierde» en el aire?
Una de las funciones de los aromas es comunicarse con los insectos polinizadores.
Las plantas y árboles son seres muy complejos (¡más de lo que imaginamos!) y aparte de comer y sobrevivir, se comunican entre ellas y con su entorno. Una de las maneras de comunicarse es a través de los aromas.
Las plantas utilizan los aromas (volátiles) para indicar a los insectos polinizadores dónde se encuentran; para avisar a los depredadores de que no son comestibles, para protegerse de microorganismos, etc.
Cada especie de plantas fabrica su aroma característico que lo diferencia del de las otras. Por este motivo, nosotros podemos identificar a cada planta por su olor único.
¿De qué están formados estos aromas?
Estas sustancias aromáticas están formadas por decenas o cientos de moléculas distintas (fenoles, terpenos, cetonas, etc.).
Muchas de estas moléculas son principios activos, es decir, que si entran en contacto con nuestro cuerpo provocan algún efecto directo sobre algún órgano o sistema (digestivo, inmunológico, nervioso, circulatorio, etc.).
Por este motivo, los aceites esenciales tienen propiedades terapéuticas concretas.
¿Cómo se consiguen los aceites esenciales?
Si sometemos las plantas aromáticas a un proceso de destilación, obtendremos el aceite esencial.
Se necesitan muchos quilogramos de planta para obtener unos pocos mililitros de aceite esencial. Por este motivo su precio es elevado.
Planta | Kg necesarios para extraer 1kg de aceite esencial |
---|---|
Clavo | 8 |
Lavanda | 150 |
Azahar | 2.000 (de flor) |
Rosa de Damasco | 4.000 (de flor) |
Gracias a la cromatografía, podemos saber la composición exacta de un aceite esencial, es decir, qué moléculas contiene y en qué cantidad.
Por ejemplo, sabemos que el aceite esencial de orégano contiene 43 moléculas, siendo el carvacrol la molécula de mayor proporción, con propiedades antimicrobianas.
¿Para qué sirven los aceites esenciales?
Todas las antiguas civilizaciones han usado los aceites esenciales, tanto para tratar enfermedades como para darle un uso místico o religioso.
Como hemos mencionado, los principios activos de los aceites esenciales provocan efectos farmacológicos en nuestro cuerpo, lo que los hace muy útiles para infinidad de problemas de salud.
Además, los aceites esenciales tienen la capacidad de actuar sobre nuestras emociones, siendo de gran utilidad para afrontar situaciones de la vida o problemas emocionales.
Nos ayudan a tratar problemas de salud, tanto físicos como emocionales.
La ciencia de tratar problemas de salud con aceites esenciales se llama aromaterapia. Personalmente, considero a la aromaterapia como fitoterapia, ya que los aceites esenciales no dejan productos que provienen de plantas medicinales.
¿Por qué es importante que sean PUROS o NATURALES?
No todos los aceites esenciales que se comercian tienen la calidad necesaria.
Como sucede con cualquier producto que se venda, existen diferentes calidades. Los de mejor calidad son los aceites esenciales puros o naturales.
Para obtenerlos se requiere de un procedimiento complejo y más o menos costoso y esto se refleja en su precio final.
Con el «boom» de los aceites esenciales, han aparecido cientos de marcas que los comercializan aceites sin unas garantías de calidad mínimas (e incluso adulterados). Esto supone un grave problema si queremos hacer un tratamiento de salud, pues las propiedades de la esencia no serán las mismas e incluso podemos tener problemas con su toxicidad.
No todos los aceites esenciales que hay en el mercado son aptos ni tienen la calidad suficiente.
Para hacer un buen aceite esencial se necesitan muchos kilos de planta o flores, junto con un procedimiento complejo. Esto justifica que tengan un precio elevado y al mismo tiempo, nos debería hacer desconfiar de los aceites muy baratos.